“Año nuevo, vida nueva” suena bien en estos días, pero son sólo palabras vacías cuando no cambiamos el corazón. Jesús prometió una nueva vida a todos los que creyeran en Él, que se hace realidad en el hogar, día a día, como veremos hoy.
“Año nuevo, vida nueva” suena bien en estos días, pero son sólo palabras vacías cuando no cambiamos el corazón. Jesús prometió una nueva vida a todos los que creyeran en Él, que se hace realidad en el hogar, día a día, como veremos hoy.